Leandro Taub es un polifacético argentino de ascendencia polaca, criado en la Patagonia, Uruguay. A los 23 años viajó a la India, luego a China, Mongolia, Estados Unidos y lleva casi una década recorriendo el mundo.
A sus 31 años ha escrito ya 3 libros y es conferenciante, cineasta, músico, dibujante, estudioso de la numerología, la economía, el yoga, la cábala, el chamanismo y el tarot. Recientemente, ha publicado “La Mente Oculta” (Editorial EDAF), que cuenta con la presentación de Alejandro Jodorowsky.
– Te defines como escritor, actor, matemático, fotógrafo….
– Un popurrí de todo… Jajaja. Somos algo muy grande, muchas cosas a la vez. Cuando me tengo que presentar no puedo definirme con palabras, así que muestro las obras que voy realizando. Soy una esencia que está experimentando la vida a través de un cuerpo humano y que tiene mucho hambre por vivir, por crear…
El instinto natural de trabajar y crear está presente en todos nosotros, en nuestra sexualidad, que es desde donde generamos todo, desde crear un hijo hasta otras formas de creatividad.
– De cada experiencia aprenderás cosas distintas. ¿Con cuál te quedas ahora?
– No aprendemos de las ideas; aprendemos de las experiencias. Y nada mejor que experimentar a todos los niveles. Desde las obras que realizo a los países que habito; en lugar de definirme por nacionalidad, soy y me adapto a las culturas donde estoy y aprehendo de eso.
Así es como funciona el crecimiento: aquello que inocentemente llamamos Yo, es un Ego que se identifica con los ojos de observación y con esas definiciones que nos imponemos. Al tener nuevas experiencias, me expando, amplio mi definición del Yo y me asocio con más realidades.
– Eres aún muy joven. ¿Cómo empezó esta inquietud por saber?
– La número 1 fue cuando dije: “mamá, papá, ¿me voy a morir?”. Sentí un vacío, un abismo, un vértigo, al saber que dejaríamos este cuerpo. Es una emergencia darse cuenta de que estamos viviendo una experiencia finita en estos vehículos que ocupamos.
Fue el primer llamado urgente a que en mi vida no pueda haber “No”. No me importan los “No” de nadie: de la sociedad, de la cultura, de la religión, del mundo…
Busco respuestas y mejorar las preguntas, encontrándome con quienes me brindan herramientas, como mis padres y hermanos, Lou Couture, Alejandro Jodorowsky, y muchos otros maestros. Aprendo de cada uno lo que debo aprender y sigo adelante.
– De tu experiencia en la India escribiste tu primer libro, “Sabiduría Casera” centrado en cuidar la salud, ¿no?
-Por casualidades, me encontré con Lou. Me enseñó que lo básico comienza por la salud a nivel físico, mental, emocional y espiritual; algo que depende de nuestras acciones diarias.
Armamos este libro sobre cómo la salud depende de cinco actividades cotidianas: cómo respiramos, nos alimentamos, nos movemos, dormimos y pensamos. Todo se basa en más de 30 años de estudio por parte de Lou en distintas disciplinas y en el conocimiento del vedanta.
– ¿En la India profundizaste en la Meditación?
– Sí, en India aprendí más sobre meditación y, mientras preparaba “La Mente Oculta”, realicé una profunda exploración sobre el tema. La mente se puede segmentar en partes, en actividades que realiza y en modos de operar según las ondas mentales. Los pensamientos son ondas que van desde las más agitadas hasta las más alineadas o concentradas.
La meditación se relaciona con uno de los modos más eficaces de operar de la mente, lo que llamamos la anihilación mental, que puede ser activa o pasiva. Las distintas formas de actividad mental determinan nuestro bienestar o sufrimiento.
Nuestro cuerpo emocional sigue al cuerpo mental. Si nuestras emociones son guiadas por los pensamientos erráticos, el estado emocional estará en turbulencia. La anihilación mental representa un estado de plena presencia, donde las ondas mentales desaparecen y solo somos. En ese punto, somos testigos silenciosos de la vida.
Alejandro Jodorowsky ha escrito una pequeña presentación de “La Mente Oculta”. ¿Cómo os conocisteis?
En 2009, una amiga me recomendó ver “La Montaña Sagrada”. Estaba en plena investigación del Tarot y encontré una resonancia increíble en su trabajo. Luego publicaron sobre mi primer libro en el blog de Jodorowsky. Cuando estás iniciando, que alguien de su calibre comparta algo de ti es un regalo invaluable. Hablamos varias veces y un año atrás le propuse escribir una presentación para mi último libro, y estoy eternamente agradecido.
Su breviario explora la conexión entre mente y corazón. ¿Cómo hacemos para que se lleven bien?
Algunos entienden pero no sienten; saben lo que deberían hacer pero no actúan. Otros sienten pero no comprenden; tienen la capacidad de actuar, pero no saben para qué. La clave es unir estos aspectos, comprenderlos, sentirlos y llevarlos a la acción.
Además, hay quienes conectan directamente el pensamiento con poder sexual, lo que puede generar acciones descontroladas. La fuerza proviene de la capacidad de hacer, pero sin el corazón, falta empatía y compasión, pudiendo llevar a situaciones extremas.
Todo comienza en el cuerpo mental; la idea no puede llegar al corazón sin reflexión. Es crucial que pensamientos, palabras y acciones estén alineados.
– Eso te sucede a menudo. Propósitos como hacer más ejercicio y luego no lo hacemos. ¿Qué pasa ahí?
– El pensamiento sin acción es inútil. Todas nuestras acciones generan karma, respuestas del universo. Lo que piensas, dices y haces crea tu realidad. Una mente controlada evita la dispersión de pensamientos.
Si organizamos un objetivo, debemos llevarlo a la acción. De lo contrario, seguimos descontrolando una de nuestras mayores otoridades: nuestra mente.
– En Occidente, ¿estamos demasiado identificados con la mente?
– El ego se identifica con la imagen de uno mismo y se apega a memorias, tanto útiles como inútiles. Estas memorias pueden ser limitantes y generar creencias como “no se puede”. Pero es crucial recordar: si no crees que algo es imposible, podrías lograrlo.
– ¿No sabías que era imposible o no hiciste caso a quien te dijo que lo era?
– Simplemente no entró en mi existencia. Acepté, agradecí y seguí mi camino. Si alguien me dice que no puedo, eso es un reflejo de su propia incapacidad, no de la mía. Estoy aquí para mejorar el mundo que he recibido.
– ¿Qué es una mente controlada?
– Implica la auto-observación, donde podemos observar nuestros pensamientos, emociones y acciones. Sin esa observación, solo reaccionamos como robots programados por memorias y hábitos.
– ¿Y cómo podemos controlar la mente?
– Es fundamental darle a la mente objetivos claros. Al auto-observarte, puedes ir cambiando los objetivos y enfocarte en las acciones que los respalden.
Organizar el presente es esencial: este momento es lo único que podemos controlar. Así se evita la inestabilidad mental, emocional y el caos.
Además, te interesa mucho la Numerología. ¿Por qué?
Creo que los números son el lenguaje de lo manifestado, desde el Microcosmos hasta el Macrocosmos. Encuentro patrones repetitivos en lo que nos rodea, y eso me fascina.
Texto y fotografías: Cristina García Castro