El aborto desde la perspectiva sistémica de Constelaciones Familiares
Las Constelaciones Familiares nos ayudan a hacer consciente los desórdenes sistémicos en los que estamos implicados con nuestros ancestros, para que poco a poco podamos ir ocupando sólo nuestro lugar, y tener así nuestra energía disponible para nuestra vida.
Un desorden sistémico muy habitual es ocupar el lugar de los excluidos del sistema, y el gran excluido del sistema son los abortos. Por supuesto esto puede suceder en la mayoría de los casos de forma inconsciente
Un hecho característico que aparece en muchas Constelaciones Familiares, es la presencia de los abortos del sistema que no han sido reconocidos y que necesitan ser vistos con amor y reincluidos, para que ocupen su lugar donde les corresponde.
El inconsciente familiar de los sistemas familiares se rige por varias leyes. Aquí hablaremos de la Ley de la Pertenencia, según la cuál todos los miembros del sistema tienen su lugar por igual, por tanto los abortos también tienen su lugar en la familia aunque no hayan llegado a nacer.
Por ejemplo, una pareja que ha tenido dos hijos vivos pero además tuvo tres abortos, es importante que integre que han tenido 5 hijos, aunque sólo dos de ellos estén vivos. De tal forma que el que decían que era el mayor y ocupaba el primer lugar, ahora pueda ocupar su lugar real en el caso de que por ejemplo, antes que él hubiera dos abortos. Si los padres toman conciencia de esto y hacen este trabajo de mirar a sus hijos no nacidos, en este caso, a este primer hijo vivo le darían el lugar del tercero de sus hijos, permitiendo de esa forma que se diera el orden sistémico entre sus hijos y en la familia.
Dar el lugar que le corresponde a cada uno es muy importante. Si los padres lo hacen, liberan a sus hijos vivos de tener síntomas relacionados con la necesidad de incluir a sus hermanos no vivos.
Todo aborto excluido va a ser reemplazo por alguien vivo, por esa Ley de la Pertenencia. De manera que hay síntomas en la vida de algunas personas que están relacionados con el reemplazar a modo inconsciente a esos abortos, o lo que es lo mismo, llevar el destino de esos abortos, y por fidelidad a ellos, repetirlo o manifestarlo en su vida de alguna forma.
Algunos síntomas de reemplazar a abortos o tener fidelidad a abortos son:
- Sobrepeso, obesidad y/o engordar sólo en la parte del vientre, donde simbólicamente está llevando a los no nacidos.
La obesidad es una enfermedad con una influencia sistémica, en la cuál se suele ver que la persona está llevando inconscientemente la memoria de muchos abortos. Hay más intrincaciones relacionadas con la obesidad, pero la fidelidad a abortos, es una de las principales. - No poder tener hijos vivos, o no poder concebir, por fidelidad a los abortos a los que mira inconscientemente.
- El desorden sistémico también puede estar relacionado con el hecho de reemplazar a las madres de los abortos del sistema. La mujer que tiene este desorden sistémico le es difícil tener hijos propios porque no está disponible, ya que la energía de esa mujer está en hacer de madre de otros fetos que no son sus hijos. Aquí la solución es devolver a esas otras mujeres su lugar de madres con respecto a sus hijos. Despedirse de esos abortos, y ocupar su lugar.
El siguiente paso es poder ver a su propia madre. En muchos casos, este tipo de desorden sistémico dificulta que la mujer pueda identificar la figura materna con su madre biológica. Esto es debido a que el desorden que ha llevado hasta ahora era reemplazar a una o varias ancestras anteriores a su madre, lo cuál no le permitía sentirse más pequeña que su madre, sentir de quien le venía la vida. - Tener metas y proyectos que la persona boicotea y no llega a culminar. En esa no culminación es fiel a esos abortos, al abortar su proyecto.
- También cuando habitualmente se empiezan actividades y no se terminan. Es como dejar algo a medias, como la vida que no terminó de nacer.
- Cuando una persona en su vida experimenta el sentimiento de abandono. Hay personas que cargan con esta sensación, llegando a tener consecuencias como un ataque de pánico, a quedarse paralizadas, sin saber cómo salir de ese estado en el momento en que se activa. Ese sentimiento de abandono no pertenece a una persona adulta, y en muchos casos también corresponde a ser fiel a abortos del sistema.
- En todos estos casos hay una frase inconsciente hacia ellos: “yo igual que vosotros”, que significa: os sigo a través de abortar mi vida.
Cuando los síntomas que se desencadenan son muy intensos, es muy posible que esos abortos además hayan sido provocados, porque se está llevando el sentimiento de rechazo que experimentaron. De tal manera que hay una asociación “abandono=muerte”. Por eso hay síntomas que son tan intensos y paralizantes. Eso también explica que algunas personas crean consciente o inconscientemente que si el otro no está, se mueren. En realidad lo que sucede, es que si el otro no está, o el otro se va, o el otro me abandona, se siente como un rechazo, el mismo rechazo que sintió el feto cuando lo abortaron.
Muchas personas que hacen cualquier cosa por complacer para no ser abandonadas, suelen también tener este tipo de fidelidad, entre otras que pueda haber, ya que siempre hay que ver el caso por caso y no olvidar que las generalidades son sólo eso, generalidades.
En cada caso, lo que conviene es constelar el síntoma que cada uno tenga: la obesidad, la maternidad, el sobrepeso, el sentimiento de abandono, etc. y la constelación sacará a la luz lo que necesite ser visto en ese momento.
Visualización para incluir a los abortos excluidos del sistema
Cierras los ojos y visualizas detrás de tu hombro izquierdo a tu madre y toda la rama materna; y detrás de tu hombro derecho a tu padre y toda la rama paterna.
Visualiza a todo el sistema, todas las generaciones. No importa que no les hayas conocido y no veas sus rostros, es suficiente con poner la intención en darles a todos su lugar.
Ahora ves también a los abortos en todas las generaciones, y te dejas guiar por la visualización aunque no tengas esa información de forma consciente y te abres a ver lo que necesite ser visto con mucho amor.
Y les dices (muy despacio y tratando de sentirlo):
“Tomo vuestro dolor en mi corazón. Y lo dejo con vosotros.
Todos pertenecéis al sistema. Todos tenéis vuestro lugar.
Ya todo vuestro sufrimiento ha terminado. Podéis descansar en paz”.
Ahora les visualizas junto a sus padres y a sus madres y les dices:
“En mi corazón tenéis un lugar para el reencuentro”
Si tú que estás leyendo esto tuviste abortos propios, podéis visualizarles, mirarles con mucho amor uno a uno, y decirles:
“Querido hijo, te tomo en el corazón como a mi hijo. Ahora te veo. Ahora te doy tu lugar. Tú también perteneces a esta familia”.
Visualizar a los hijos vivos (si se tienen), y a los que están muertos, incluyendo los abortos. Y decirle a cada uno el lugar que ocupa. Te puede ayudar poner nombre a cada hijo que no nació, y llamarle por su nombre.
Por ejemplo, si se tienen dos hijos vivos y tres abortos, y antes del primer vivo, hubo dos abortos. En ese caso, el primer hijo vivo en realidad es el tercero.
En ese caso los padres dirían al hijo vivo,
“Te doy tu lugar en mi corazón como a mi tercer hijo”
Visualizar a los abortos, y uno a uno decirles el lugar que ocupan
“Te tomo en mi corazón como a mi primer/segundo…etc hijo”.
Las personas que han tenido algún aborto provocado, es especialmente importante que hagan el duelo de ese hijo, que normalmente está bloqueado. Es habitual que quien se practicó un aborto esté expiando esa culpa en su propia vida de forma inconsciente, a través del no tener pareja, no tener hijos, trabajo o dinero.
En este caso, la Constelación trabaja para que la persona asuma lo ocurrido, acoja a su hijo abortado con amor, y se reconcilie con él. Es fundamental poder mirar lo ocurrido, para luego poder dejar el pasado atrás; pero para liberar el pasado primero es necesario mirarlo de frente. Este paso es fundamental.
En todos estos casos, el trabajo con Constelaciones saca a la luz la fidelidad inconsciente que cada uno tenga, para honrar lo que necesite ser honrado, ver lo que necesite ser visto, y así la persona poder mirar a su destino, y dejar atrás la fidelidad al destino de sus ancestros.
Psicóloga Especializada en Nuevas Constelaciones Familiares