A punto de cumplirse un siglo desde que el Dr. Edward Bach comenzara la elaboración del primer sistema floral, en las últimas décadas han proliferado nuevos sistemas, como el de Mediterráneo, Bush, California, Orquídeas, y un muy largo etcétera de variados sistemas que enriquecen, amplían y matizan el sistema pionero del Dr. Bach.

Una nuevo salto evolutivo se presenta ahora ante nosotros: las Esencias Inteligentes.

Las esencias florales, pertenecen al ámbito de las terapias vibracionales. Estas terapias se basan en estímulos que, por lo general, no tienen un principio activo químico responsable de una acción farmacológica, sino que actúan a partir de una cualidad vibracional, de una frecuencia energética concreta que, al entrar en sintonía con las frecuencias energéticas del ser humano, tienen la capacidad de equilibrar o provocar la restauración de esa frecuencia energética perdida.

La experiencia práctica en este ámbito, nos lleva a observar una relación entre funciones orgánicas y frecuencias energéticas, tanto en el ámbito psíquico como en el físico. Encontramos muchos casos en los que un sistema o parte de un sistema (respiratorio, digestivo, circulatorio, determinadas emociones o patrones de comportamiento y pensamiento, etc) deja de ser funcional, y comienza a manifestar una sintomatología asociada a su pérdida de función, y que la causa se encuentra en el campo energético de la persona. Al profundizar en la situación concreta de esa persona y administrar el remedio vibracional indicado, vemos que se restaura la funcionalidad de ese sistema y como consecuencia desaparece la sintomatología asociada.

Este tipo de situaciones se observan a diario en las consultas de acupuntura, homeopatía, de terapias con campos magnéticos, de terapias con sonidos, en los practicantes de yoga, taichi, y una gran variedad de prácticas denominadas vibracionales o bioenergéticas.

Centrémonos en un tipo particular de terapia bioenergética: las esencias vibracionales.

Una esencia vibracional es un remedio formado por una combinación de agua mineral natural y un tipo de alcohol destilado (habitualmente brandy) que, a través de una técnica específica (solarización, ebullición, cristales de cuarzo, etc), «se carga», «adquiere», «se impregna», de un tipo de cualidad vibracional determinada, generalmente obtenida desde elementos naturales. Este remedio se puede administrar vía oral o en uso tópico como estímulo terapéutico bioenergético.

De esta manera, si utilizamos la vibración de una flor para elaborar la esencia obtenemos una esencia floral. Si utilizamos un mineral, una esencia mineral, etc.

En la actualidad se elaboran esencias a partir de flores, minerales, sonidos, montañas sagradas, animales, notas musicales, etc.

Todas las esencias vibracionales comparten unas características comunes:

· no basan su acción terapéutica en principios activos, sino en cualidades vibracionales.

· su mecanismo de acción se fundamenta en la relación que existe entre el campo energético humano y sus funciones físicas y psíquicas. Esta relación muestra que un déficit de frecuencias energéticas provoca una alteración en las funciones orgánicas y psíquicas.

· cuando a través del estudio individualizado de la persona se puede establecer una relación entre alteración en el campo energético y la función física o psíquica. Al administrar la esencia adecuada se restablece la parte del campo energético afectado, y como consecuencia el organismo recupera sus funciones físicas y/o psíquicas.

Como sistema en expansión, el de las esencias vibracionales, ha crecido en número de esencias y sistemas, y en diferentes formas de elaboración de las propias esencias, pero realmente las primeras esencias de Bach y los sistemas más actuales forman parte del mismo tipo de esencia vibracional.

Mi intención con este artículo, es presentar lo que considero un salto evolutivo en las esencias vibracionales: las Esencias Inteligentes.

Una forma sencilla de acercarse al fundamento de las esencias inteligentes es a través de uno de los pilares del pensamiento tradicional chino, el Taoísmo.

De acuerdo al Taoísmo, tanto nuestra realidad manifestada más externa, aparente o densa (la material y energética), como nuestra realidad más oculta, misteriosa y profunda (el ámbito espiritual), proceden y están conectadas a lo que denominan el «origen sin origen», el «principio sin principio», también llamado Vacío primordial, o Tao. Así, el Vacío primordial (potencialidad total), se manifiesta en una dualidad dinámica yin- yang de opuestos complementarios. Ambos polos proceden, dependen y están conectados al vacío original, al Tao.

Cada ser humano está conectado al Vacío primordial, a la fuente original, y en función de la calidad e intensidad de esa conexión, mantiene fuerte su yin y su yang, conserva y mueve su energía y salud, y expande su conciencia.

Las milenarias tradiciones orientales entendieron la importancia de la conexión del ser humano al Vacío primordial, y desarrollaron técnicas para fortalecer e intensificar esa conexión, como la meditación. A través de los distintos tipos de meditación, cada persona recorre el camino hacia el Vacío primordial, la conexión a la fuente original, al Tao.

¿Que sucedería si hiciéramos una esencia vibracional cuyo principio terapéutico fuera la conexión del ser humano al Vacío primordial, al Tao?

Obtendríamos una esencia inteligente.

Una esencia inteligente es, por tanto, una esencia vibracional cuyo principio terapéutico es la conexión (en este caso del ser humano), al Vacío primordial, al Tao, al «origen sin origen», al «principio sin principio».

¿Qué utilidad tiene? Una esencia inteligente contiene todas las posibilidades y frecuencias vibracionales, en estado potencial. Al ser tomada, la propia esencia reacciona de acuerdo a las necesidades de cada persona, desplegando en cada caso el estímulo o estímulos que esa persona necesita.

¿Qué sucede cuando tomamos una Esencia Inteligente?

Pues que de manera progresiva, la persona restablece sus frecuencias bioenergéticas alteradas, en el plano físico y mental-emocional, junto con sus campos de información, y posteriormente comienza la expansión de su conciencia.

¿Es compatible con otras terapias?

No sólo es compatible, sino que es recomendable.

De esta manera, el mundo de las terapias con esencias se enriquece con un nuevo tipo de expansión. Hasta ahora hemos asistido a la impresionante expansión horizontal de variados tipos de sistemas de cada parte del mundo. Ahora presenciamos la expansión vertical con la posibilidad de la elaboración de esencias inteligentes conectadas al universo, al Tao.

Expansión horizontal y expansión vertical, polaridades complementarias que enriquecen y fortalecen la terapia con esencias vibracionales.

Alberto Gala Jiménez

Investigador y elaborador de esencias inteligentes.

www.esenciataoista.es