Los seres humanos somos criaturas sociales que necesitamos la relación con otros seres humanos, y es a través de esta relación que logramos plenitud, felicidad y éxito en nuestras vidas. Una de las evidencias a las que han llegado los investigadores de la psicología positiva en sus estudios sobre la felicidad y las vías para lograrla es que prácticamente todo el mundo se siente más feliz en compañía de otras personas, y que una de las cosas que caracteriza a las personas más felices y dichosas es una vida social y familiar rica y positiva. Si nos vamos al ámbito del éxito, la situación es la misma. Daniel Goleman, en su ya famoso libro Inteligencia Emocional muestra las evidencias de cómo este tipo de inteligencia, y la capacidad que nos da para crear y mantener relaciones positivas, tiene un mayor impacto en el éxito profesional que el propio coeficiente intelectual.
Todos estos datos no hacen más que corroborar algo que todos sabemos por propia experiencia, sin embargo, las relaciones siguen siendo uno de los ámbitos de nuestra vida donde encontramos más dificultades. Las relaciones de pareja, con la familia, con los compañeros de trabajo, con el jefe… muchas veces no son fáciles y se convierten en una fuente de infelicidad, insatisfacción y problemas. La realidad es que los seres humanos somos criaturas bastante complejas con diferentes experiencias, perspectivas, emociones, valores e intereses, y esto hace que las relaciones entre nosotros puedan presentar dificultades.
Hace medio siglo, autores como Dale Carnegie popularizaron lo que ha dado en llamarse habilidades sociales que, como su nombre indica, están enfocadas en el desarrollo de nuestra capacidad para socializar con otras personas. Estas habilidades, como cualquier otra, están muy bien y nos pueden servir. Sin embargo, cuando de lo que se trata es de desarrollar nuestra capacidad para crear relaciones y vínculos positivos con otras personas, es necesario dar un paso más para adentrarnos en nuestra esencia humana. Más allá de la superficie de las aguas está la profundidad de nuestro ser, y es en esta profundidad donde se produce el contacto y el encuentro humano con otros. Es este contacto una vía de plenitud y de felicidad, pero también la base para las relaciones de colaboración que son las que a la postre nos ayudan a lograr el éxito en aquello que busquemos.
Por lo tanto, más que de habilidades sociales lo importante es dotarnos de habilidades humanas porque éstas se convertirán en uno de nuestros mejores aliados para experimentar felicidad y plenitud en nuestra vida, y tener éxito en nuestra profesión o en cualquier objetivo o sueño que persigamos. Lo mejor de todo es que estas habilidades son sencillas de desarrollar porque están más relacionadas con nuestra actitud y forma de estar en el mundo que con técnicas o métodos. De lo que se trata no es ni más ni menos que de conectar con nuestra propia humanidad y adoptar una actitud humana en nuestras relaciones. Esto producirá la magia y de forma natural nos encontraremos teniendo relaciones altamente positivas, satisfactorias y generadoras de felicidad y de cooperación.
¿Qué hacer para ello? Es sencillo, simplemente hemos de incorporar cinco hábitos en nuestra manera de relacionarnos. Veamos cuáles son.
Hábito 1: Aprecio
Cuando apreciamos a otra persona estamos alimentando una necesidad humana, ya que los seres humanos tenemos necesidad de ser valorados y queridos, y cuando recibimos este alimento nos sentimos muy bien. Para poder apreciar a otra persona, lo primero que hemos de hacer es enfocar nuestra atención en los aspectos positivos y valorables que vemos en ella, y después tenerlos muy presentes en cualquier contacto con ella.
Hábito 2: Interés sincero
Una de las cosas que caracterizan a las relaciones de amistad es que realmente nos interesamos en la vida de nuestros amigos, lo que les ocurre, lo que les preocupa, compartimos sus alegrías y buscamos echar una mano en sus dificultades. Con cualquier otra relación podemos aplicar esto mismo para imbuirla de una cualidad amistosa y afectiva.
Hábito 3: Ayuda
¿Qué ocurre cuando recibimos ayuda de alguien, especialmente si es inesperada? Pues que apreciamos y valoramos eso que esa persona está haciendo por nosotros, y en consecuencia nuestro aprecio y valoración por la persona aumenta. La actitud generosa y de ayuda crea más puentes entre las personas que ninguna otra cosa porque ayudar es una actitud muy humana que nos conecta con nuestra propia humanidad y con la humanidad de la otra persona.
Hábito 4: Reconocimiento
Los seres humanos tenemos necesidad de sentirnos valiosos y de respeto por nosotros mismos. Cuando le reconocemos a otra persona su buen hacer o algo positivo suyo, estamos proporcionándole alimento para esta necesidad, y esto crea una conexión con ella en un nivel humano.
Hábito 5: Gratitud
Es difícil entender nuestra vida sin la aportación que a ella hacen las personas con las que nos relacionamos a diario, y otras muchas que nunca vemos pero que son fundamentales para que podamos disfrutar de todos los productos y servicios que nos hacen la vida más fácil y rica. La gratitud es una exquisita cualidad del espíritu humano que, cuando está presente en una relación, produce contacto y vínculo entre las personas.
Estos sencillos cinco hábitos tienen un enorme poder para ayudarnos a que nuestras relaciones sean una fuente de felicidad, plenitud y éxito. Indudablemente, cuando de lo que hablamos es de relaciones, no todo depende de nosotros y la actitud de la otra persona también influye. Sin embargo, es importante no minusvalorar el poder que estos cinco hábitos tienen para influir en la actitud del otro.
¿Y qué hacer cuando nos encontramos con personas difíciles o conflictivas? Pues en primer lugar no permitir que la actitud de la otra persona nos haga perder el contacto con nuestra propia humanidad, esto puede hacer la magia de transformar su actitud. Si no es así, inteligencia para no entrar en conflictos graves y firmeza para no dejarnos atropellar.
Que tengas un gran día.
Juan Manuel Martín Menéndez
Escritor
Autor del libro «Que tengas un buen día»
www.quetengasungrandia.com