Emociones, el veneno de la felicidad

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2,4 minutos de lecturaActualizado: 19/09/2024Publicado: 12/11/2014Categorías: Desarrollo Personal, Mujer SaludableEtiquetas: , , , , , , , , , , , , ,

Con frecuencia al experimentar sentimientos dolorosos como soledad, desesperación, enfado, fracaso o preocupación tratamos de huir. Escuchamos música, vemos televisión, leemos revistas, comemos cualquier cosa evitando entrar en contacto con la emoción dolorosa. Al no saber cómo gestionar, afrontar o resolver tales situaciones, tratamos de ocultar la emoción a través del consumo. Pero de esta forma no resolvemos el malestar. Más bien se agrava. A la desatención se van sumando los problemas derivados del consumo como sobrepeso, enfermedad e insatisfacción.

Mantener los conflictos internos derivados de asuntos sin resolver va menoscabando nuestro estado de bienestar y en consecuencia pensamientos transfórmalos en positivos.
Cuando la emoción sea excesivamente intensa utiliza la práctica de respiración consciente para superar el «huracán» emocional. Es muy sencilla y de fácil aplicación pero altamente eficaz. Consiste en darte cuenta de tu respiración. Tumbado o sentado cómodo, respira profundo, enfoca toda tu atención a tu vientre, simplemente sigue el recorrido del aire, llevándolo hacia tu abdomen. Toma consciencia de cómo se hincha llenándose de aire al inhalar y se vacía al exhalar expulsando todo el aire fuera. Detén todo pensamiento mientras continuas con la respiración. Recuerda que las emociones se alimentan con los pensamientos. Si no se dan las condiciones idóneas no crecen. Retírales el alimento y morirán.

Realiza esta respiración consciente durante 10´, 15´,20´o media hora. Hasta que sientas que la tormenta ha pasado. Entonces cuando se haya aflojado un poco estarás en disposición de realizar la práctica de reflexión, identificación y cambio.

Con el dominio emocional nos vamos fortaleciendo. Lo que hace que se pierda el temor a las emociones, adquiriendo seguridad frente a ellas y mayor confianza en las propias capacidades.

Y ahora me voy a despedir con una bonita historia.

En el origen de los tiempos, los dioses se reunieron para crear al hombre y a la mujer. Decidieron hacerlo a su imagen y semejanza, pero uno de ellos dijo:

-Un momento, si los creamos a nuestra imagen y semejanza, van a tener un cuerpo igual al nuestro y una fuerza e inteligencia igual a la nuestra. Debemos pensar en algo que los diferencie de nosotros, de lo contrario estaremos creando nuevos dioses.

Después de mucho pensar, uno de ellos dijo:

– Ya sé, vamos a quitarles la felicidad, donde nunca la encuentren.

Todos le miraron asombrados y le preguntaron:
– ¿Dónde?
– La esconderemos dentro de ellos mismos, estarán tan ocupados buscándola fuera, que nunca la encontrarán.

Todos estuvieron de acuerdo, y desde entonces el hombre se pasa la vida buscando la felicidad sin darse cuenta que la lleva consigo.

María M. Alcázar
Master Trainer PNL
Coach ontológico
Directora del IEPNL
www.pnlspain.com

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