Casi nadie conoce el verdadero orden de nacimiento que ocupa en su familia, pues casi todas las madres han tenido microembarazos que duran horas o días, y a nivel espiritual esos embarazos inconscientes también forman parte del sistema familiar.
Ocupar un lugar equivocado en el sistema familiar es un problema serio, porque significa llevar una carga que no nos corresponde, y usurpar el espacio de un hermano o hermana que no ha sido reconocido.
La falta de reconocimiento de los hijos no nacidos da lugar a multitud de disfunciones vitales, como estas:
Disfunciones de los padres respecto a todos los hijos
Cuando los padres no tienen bien colocados a sus hijos por no haber reconocido su lugar a los no nacidos, sienten que “les falta algo”. Eso hace que siempre se sientan algo insatisfechos con sus hijos nacidos, y que esperen de ellos más de lo que estos pueden dar de sí.
Disfunciones respecto al orden como hermano
• El falso hermano mayor:
A quien se le ha atribuido erróneamente el rol del primogénito siente que se le ha cargado injustamente un exceso de responsabilidad. Eso se traduce en tensiones con sus padres, y en su vida respecto a su rol conservador, paternalista y perfeccionista.
• El falso hermano pequeño:
Lo normal es que ese niño tenga conflictos con sus padres respecto a tener que ser “el último en todo”. En su vida, presentará conflictos respecto a su rol impuesto de bohemio, amante del riesgo y animador familiar.
• Desórdenes en los hijos intermedios:
Cuando entre dos hermanos nacidos existen otros no nacidos, es frecuente que los hermanos que supuestamente van seguidos se sientan más distantes de lo que cabría esperar.
La terapia de alineamiento familiar
Para poder definir cuál es nuestra auténtica posición en nuestra familia necesitamos contar con el permiso de nuestro sistema familiar y la ayuda de nuestros guías espirituales.
Son nuestros guías quienes nos van indicando en qué lugar hay que colocar a cada componente del sistema familiar para poder crear armonía, y liberarnos de las cargas que no nos pertenecen.
Es muy importante contar con un canal limpio y protegido para que nuestro sistema familiar y nuestros guías puedan conducir la terapia sin interferencias.
Beneficios
Al igual que ocurre con las constelaciones familiares, los beneficios y efectos de la terapia de alineamiento familiar son tanto para el individuo como para el sistema, por lo que también podemos notar cambios espontáneos positivos en nuestros familiares.
El alineamiento familiar suele comportar bastantes sorpresas, con las que de repente comprendemos algunas contradicciones, frustraciones y patrones disfuncionales, tanto nuestros como de nuestros familiares.
Las personas que han participado en esta terapia y que han ocupado su verdadera posición en el sistema afirman que se sienten mejor consigo mismas de inmediato. Suelen decir que sienten más paz interior, más seguridad en sí mismas y que se sienten más completas, pues muchas de ellas tenían sensación de soledad o que les faltaba algo.
Algunas sienten físicamente la liberación de haber soltado un rol que no les pertenecía y haber podido reconocer y reconciliarse con quien realmente lo tenía.
En lo que respecta a las almas no encarnadas, el reconocimiento que se les brinda mediante la terapia facilita su liberación y su regreso a la fuente. Y a su vez, al honrar a nuestros padres y darles el lugar que les corresponde, los hijos encarnados conseguimos sanar heridas y sentirnos liberados.
Esmeralda Velasco Pérez
Terapeuta alineación familiar – reflexología podal técnica metamórfica