Posicionar la mente en el SI

¿Quieres liberar, moldear y trabajar tu mente? Este artículo puede ayudarte a conseguir que la mente te sirva de estímulo, de avance y de ayuda, en lugar de hacerte zancadillas al caminar.
Para empezar el viaje hacia el interior de la mente debemos reconocerla y verla como un ente separado y unido a la vez a nuestro cuerpo por el canal que los comunica, el cuello.
La frente y el casquete superior de la cabeza albergan la mente y vibran en color ROSA, que es el color de la armonía y positividad.

Nuestra mente nace con la capacidad de vincularse a la vida a través de lo positivo, tanto de nuestro interior, como del exterior. Pero se bloquea cuando no resolvemos las tareas del vivir y los conflictos que encontramos; entonces el rosa queda tapado por el color negro de la mente cerrada y obsesiva.
Cuando vamos logrando salir de esos estados de negatividad y negrura, la vibración de armonía del color rosa abre la capacidad de expansión de nuestra mente para que pueda ver el horizonte que la lleva a un futuro de renovación de la propia vida.
¡Cuánto desgastan las palabras negativas!
Cuando nacemos venimos con la mente limpia. Nuestro cuerpo trae información de las vidas anteriores que hemos tenido, pero la mente es exclusiva de esta vida y se va formando en base al proceso emocional.
Llevo años estudiando la técnica de autoconocimiento y reequilibrio corporal TRCD e investigando conmigo misma y con otras personas y, he de deciros, que al principio, me resultaba imposible pero ahora cada vez me es más sencillo diferenciar la información de la mente y del cuerpo.
Por ejemplo: Al cuerpo le apetece un dulce. Lo pide porque lo necesita, pero rápido viene la mente: “¡No! ¡Está mal! ¡Engorda!…”. A nivel emocional el dulce nutre nuestras carencias afectivas ubicadas en los brazos. Si no la nutro, cada vez me sentiré más carente y además algo comeré porque ese pensamiento seguirá ahí y tengo que llenarlo, y puede que al final sea el doble de la petición inicial y entraré en la culpa y me sentiré peor.
El ser humano piensa que la mayoría de sus problemas son emocionales y eso no es cierto. La EMOCION está inscrita en la columna vertebral. Cada vértebra tiene un color y un concepto y se activa por la edad en el individuo, abriendo el circuito de color en el cuerpo y construyendo un cuerpo energético a la vez que el cuerpo físico. No podemos estar conectados continuamente con la emoción porque no podríamos vivir. La mayoría de nuestros problemas son mentales porque llenamos la cabeza de historias que en realidad no existen.
El trabajo del ADN emocional sobre todo limpia la mente de registros aparcados en las vértebras (los temas que no se liberaron en su tiempo no lo harán después). Y los cambios corporales que se dan son consecuencia de tener la mente más libre, oxigenada y limpia. La mente es energía expansiva y a través de ella se puede rejuvenecer el cuerpo.
Cada uno tiene una mente diferente, única, y no podemos generalizar, pero propongo unas pautas para que la uséis en vuestro favor.
Lo que SÍ os digo es que LA MENTE SE PUEDE TRABAJAR para que deje de ser un obstáculo que saltar ante cualquier decisión que debamos tomar en la vida.
La mayoría de las veces al abandonar y descuidar el cuerpo le damos a la mente mayor protagonismo y al final sólo la escuchamos a ella lo que va totalmente en contra nuestro.
Nos movemos por la mente básica, la mente del juicio, del sí y el no, del bien y el mal. Y para subir un peldaño y llegar a la mente amplia, la mente de lo positivo, del SI, primero hay que trabajar la más básica y primaria.

¿Cómo trabajarla?

Cuando los clientes me preguntan por algo en concreto ya que no descansan bien o sufren estrés…, les pauto un ejercicio que os recomiendo como parte de vuestros ejercicios diarios.

Coge un boli y un papel y escribe a mano lo que se te pase por la cabeza en ese momento. Las preocupaciones, las penas, vuestros anhelos… lo que salga. Se trata de vomitar las palabras retenidas, en el papel, frases que no hemos podido expresar… A ver qué sale. Y cuando no salga nada, escribir simplemente: “no me sale nada”.

Realmente lo más importante de este ejercicio es que NO se guarda, NO se relee y HAY que romperlo y tirarlo sin más.
Si lo volvemos a leerlo, lo que estábamos sacando del cuerpo lo meteremos más profundo que antes.
Esta es una forma de despejar la mente, de limpiarla, como quien se lava con un champú cuando siente abotargada la cabeza.
¡La mente! Tantas ideas juntas, tantos pensamientos, parece que no para… Pues trabajándola puede parar, podemos sentirnos en calma, libres y ágiles de pensamiento. Pero eso se logra con constancia, un poquito cada día, pues siempre está con nosotros.

¡Fijaos todo lo que se acumula en la mente!

• Todos los pensamientos propios que generamos a lo largo del día están ahí, dentro de nuestra cabeza.

• Además, funciona como un gran radar captando los pensamientos de fuera, palabras que no se dicen, entran igualmente. La información que está “volando” por el mundo.

• Toda la información que entra por los sentidos; por los ojos las imágenes que vemos; por la nariz las cosas que intuimos, y los olores que olfateamos; por las orejas palabras que escuchamos; por la boca palabras que no decimos, las cosas emocionales que nos “comemos”….

La cabeza está llena, sobre todo llena de información negativa. No queda casi espacio y debemos hacerle hueco a cosas bellas, positivas, palabras de avance, aromas y fragancias estimulantes.

Vamos a hacer una visualización estupenda para esto:

• Durante 2 minutos tumbado boca arriba con manos y pies tocando el suelo (piernas dobladas), toma una profunda respiración y manda el aire a la frente. En la misma, empezarás a visualizar ojos de diferentes formas y colores que te miran.
Cuando esté llena de ojos los expulsarás por la boca y dejarás la mente en blanco.

• Durante 2 minutos más llenarás la mente de palabras escritas en mayúscula, tomarás una profunda respiración y sacarás por la boca las letras. Cuando la mente esté vacía tomarás una profunda respiración llenando la mente de color blanco.

• Después durante 2 minutos más inspirarás por la nariz olores y llenarás la mente de recipientes llenos de los mismos, una vez esté llena, los irás expulsando por la nariz. Cuando esté vacía completamente tomarás tres respiraciones profundas por la nariz que llenarán el cuerpo de luz y armonía y la mente de color blanco-amarillo que dará oxígeno para cambiar y ser más selectivo con el entorno.

Se puede hacer una vez al día para tener la mente más fresca y despejada a la hora de interrelacionaros y afrontar el día.
Espero que estas pequeñas pautas os ayuden a ir trabajando la mente, tenerla más clara y divertida. Eso os ayudará a no simbiotizaros con la gente, a tomar conciencia de vuestra mente y poder calmarla y trabajarla para que frene cuando necesitéis, y sobre todo a tomar realidad de que cada uno tiene un camino, su capacidad propia y por ello no debemos juzgar a los demás ni compararnos puesto que somos individuos únicos en el universo.

Ánimo

Belén Aragón Pellicer
Lcda. Ciencias Biológicas
Reequilibradora Corporal TRCD
Peluquera y Estilista Emocional
www.newstyle.com.es
www.masajesreequilibrio.com

Basado en los libros de María Gemma Sáenz:
El espejo Corporal, Ediciones Altradamun
Esa Tortura llamada mente Emocional, Ediciones Altradamun