Microorganismos beneficiosos

Regeneradores, nuestros aliados para crear un mundo mejor.

Quién iba a decir que aquellos seres que hasta hace poco habían sido considerados nuestros principales enemigos: bacterias, virus, hongos, son la solución a los principales retos en Ecología, Medioambiente, Agricultura, Ganadería, desarrollo de Tecnologías respetuosas con la Naturaleza, Medicina y Nutrición.

La mayoría de las personas a las que se les pregunta sobre virus, bacterias, hongos y otro tipo de microorganismos se refieren a ellos en términos negativos, como algo nocivo para nuestra salud y supervivencia. Este pensamiento es fruto de una cultura que considera como enemigo a todo aquello que desconoce.

Los descubrimientos de Pasteur y otros científicos como Kooch sobre las enfermedades causadas por microbios parasitarios ayudaron al avance de la medicina, sin embargo, consideraron al germen como un enemigo.

Los microorganismos no son el enemigo; sólo realizan unas funciones u otras adaptándose al ámbito y condiciones en las que viven. Todo nuestro organismo está lleno y regulado por simbiontes, microgérmenes de vida que hacen posible la existencia. Las teorías predominantes de Pasteur junto con el concepto neodarwinista de la supervivencia del más fuerte, nos han llevado a ver enemigos en todas partes y esta consciencia ha creado una realidad hostil.

La Organización Mundial de la Salud advierte que las bacterias nocivas para nuestra salud se han vuelto resistentes a la mayoría de los tratamientos antibióticos como resultado del exceso de consumo de antibióticos. Hemos creado enemigos que nos aventajan en millones de años de evolución y adaptación.

El exceso de higiene antibacteriana ha eliminado de nuestro medioambiente todas aquellas bacterias que pueden controlar a aquellas que son nocivas para nosotros, dejando a las bacterias “nocivas” el camino libre. Imaginemos un ámbito tan desinfectado, estéril y sin vida donde el único lugar con las mejores condiciones en las que pueda sobrevivir un parásito sea nuestro organismo. ¿Qué hará entonces el parásito?

El interés comercial por vender medicamentos y productos exclusivos ha creado bacterias que son competitivas con el resto de bacterias, eliminando de esta forma un factor imprescindible para nuestra salud: la simbiosis o colaboración entre las distintas bacterias. La simbiosis es la ayuda mutua entre los distintos seres que hace posible la evolución.

¡La evolución siempre es resultado de la colaboración, de la simbiosis!

La existencia en nuestro planeta es posible gracias a que las primeras bacterias transformaron un ámbito inhóspito inicial de elevadas temperaturas, volcanes, elementos ácidos y azufres, y crearon la atmósfera. Las bacterias procariotas acumularon todos estos elementos iniciales, creando un lugar donde fue posible la existencia de la atmósfera con el oxígeno y otros elementos excretados y que hoy permiten vidas complejas más desarrolladas. Estas bacterias iniciales fueron las que su unificaron desarrollando células que han hecho posible la existencia en cuerpos más complejos y sofisticados.

     

 Todo el funcionamiento de nuestro organismo está regulado por la actividad de estos pequeños y maravillosos microorganismos: la comunicación del intestino con el cerebro, la interpretación de los estímulos que los órganos de percepción le envían al cerebro, la generación de neurotransmisores y hormonas de la felicidad como la serotonina y dopamina, el desarrollo de nuestro sistema inmunológico e incluso se sospecha que nuestras células nerviosas son fruto de la unificación de bacterias.

Gracias a esta nueva sensibilidad científica, hoy muchos investigadores nos están mostrando este camino marcado por la Naturaleza para crear una realidad humana en simbiosis con el Cosmos. España es pionera en esta labor. El desarrollo de la Microbiótica es el resultado de la colaboración de profesionales de la biología (Máximo Sandín), geociencia (Lynn Margulis), psicología (Jesús Mier), agricultura regenerativa (Jairo Restrepo), medicina (Virginia Ruipérez), nutrición (Luis Ángel Lázaro, Ander Urederra) y gastronomía entre otras disciplinas y profesionales.

Sin embargo, fueron los descubrimientos del biólogo japonés Teuro Higa, imprescindibles para comprender el alcance de los Microorganismos Beneficiosos Regeneradores (EM). Los EM son un conjunto de bacterias fotosintéticas, acido-lácticas y levaduras que trabajando en simbiosis pueden transformar sustancias tóxicas y nocivas para nuestra salud y ecosistema en elementos beneficiosos.

Las aplicaciones de esta tecnología de microorganismos pueden ser utilizadas en todos los ámbitos.

Hace unos días tuvimos la suerte de asistir a un taller con el valenciano José Francisco Estevan Cloquell donde compartió sus conocimientos fruto de 20 años de trabajo con la tecnología de los EMO (Microorganismos Eficientes Orgánicos). Desde esta consciencia ecológica nace el proyecto de Emorganik, una cooperativa con el objetivo de utilizar la tecnología EMO para regenerar las aguas, vertederos de España y aplicar los microorganismos beneficiosos en nuestra vida diaria, en la higiene personal, la limpieza de la casa, la nutrición y para nuestra salud y la de los animales.

“Los EMO,- cuenta José Estevan,- tienen la capacidad de escanear el ambiente en el que son utilizados y reconocer las características del mismo a través de la resonancia. Mediante rayos infrarrojos emitidos por las bacterias saben qué tipo de bacterias de este grupo de microorganismos tienen que actuar para equilibrar el medio y llegar a la simbiosis.”

Con el uso de herramientas sencillas pero poderosas, como el CUBOKASHI, un cubo de basura orgánica activado con EMO podemos utilizar nuestros residuos orgánicos para convertirlos en compos y humus que fertilizan nuestras tierras. Las bolas DANGO, hechas a base de EMO, son utilizadas para limpiar los ríos de nuestro país, desintoxicar vertederos, sumideros. De esta forma se están utilizando soluciones madre de microorganismos regeneradores para transformar nuestra realidad.

Nosotros nos hemos unido a esta iniciativa. Tú también puedes ayudarnos a crear un mundo mejor en resonancia y simbiosis con los Microorganismos Benéficos Regeneradores.

 

 

Equipo Scheller
www.emorganik.com